Toda la política de Mariano Rajoy y el Partido Popular se reduce a dos aspectos: recortes sociales y económicos y subida de impuestos. A la vez esto no es sino la gran mentira popular para conseguir llegar al poder. Se dicen unas cosas y se ocultan bastantes mas para ganar las elecciones y después desdecirse y sacar el programa oculto.
Ya han sobrepasado todas las líneas rojas que ellos mismos se habían impuesto. “Todos es susceptible de recortes menos la sanidad la educación y las pensiones” decían. Y la gran mentira se evidenció cuando a los pocos días de presentar los Presupuestos Generales del Estado anuncian recortes por importe de 10.000 millones de euros en sanidad y educación. Y como las cuentas no les cuadran ya han sobrepasado otra de las líneas rojas: la subida del IVA.
Cuando Zapatero subió el IVA en 2010 se levantaron en santa cruzada contra esa decisión. Las declaraciones de sus dirigentes fueron clamorosas:
“La subida del IVA es la puntilla para el comercio, el turismo y la industria“ (Soraya Sainz de Santamaría 10 de marzo de 2010)
“Es un disparate subir el IVA en tiempos de crisis” (Mariano Rajoy 14 de marzo de 2010)
“No rotundo a la subida del IVA” (Cristóbal Montoro, 17 de marzo de 2010.)
“Subir el IVA un 2% es como bajar el 2% el salario de los trabajadores” (María Dolores de Cospedal, septiembre de 2010)
Y la extrema derecha del P.P. representada por Esperanza Aguirre lanza una campaña contra el IVA recogiendo 150.000 firmas en Madrid.
Ganaron las elecciones, comenzaron los recortes pero siguieron negando cualquier posibilidad de subir el IVA. Estaban todavía pendientes las elecciones de Andalucía y Asturias y no había que espantar al electorado:
“No está en nuestra previsiones subir el IVA” (Mariano Rajoy, 10 de enero de 2012.)
“No habrá subida del IVA” (Cristóbal Montoro” 15 de marzo de 2012)
“Este gobierno no va a subir el IVA” (Soraya Sainz de Santamaría 30 de marzo de 2012)
Ya no hay elecciones a la vista y ahora ya no importa que el P.P. muestre su verdadera cara. Ahora van a por todo. Así lo anunció, la semana pasada, el Ministro de Economía Luis de Guindos “en 2013 habrá una modificación de la estructura impositiva”. Bajo este eufemismo, de Guindos nos viene a decir que subirán los impuestos al consumo (entre ellos el IVA) y para compensar, bajaran las cotizaciones sociales a los empresarios. Yo no es tabú el IVA, ya no se va a arruinar la industria el turismo y el comercio, ya no es un disparate subir el IVA o ya tampoco va a tener una repercusión sobre el poder de compra de los trabajadores. Ahora se ven obligados a subir el IVA (pobrecitos) por la herencia recibida.
El gobierno del P.P. se ha convertido en los más talibanes de la política económica europea.cuando ya hasta la Merkel se empieza a cuestionar la necesidad de los incentivos a la económica para salir de la crisis, Mariano Rajoy y sus mariachis siguen erre que erre con la misma cantinela: llevar al país al borde el abismo y empujarlo.
Yo soy firme defensor del incremento de los impuestos, pero de los impuestos directos, los que gravan la renta de las personas porque son progresistas, porque paga más quien mas tiene. Sin embargo, soy contrario al incremento de los impuestos al consumo(los indirectos), el IVA entre ellos, porque son totalmente injustos e insolidarios, porque gravan por igual a ricos y pobres y porque en situaciones de crisis como la actual producen el efecto contrario al deseado.
Los impuestos al consumo retraen el gasto de los ciudadanos y como consecuencia la economía se contrae, incrementa el desempleo con lo que se incrementa el gasto por prestaciones de desempleo. Como consecuencia de la contracción de la economía, disminuyen los ingresos por la recaudación del impuesto con lo cual el déficit se incrementa. Como consecuencia del incremento del desempleo, el consumo se contrae más y vuelta a empezar con lo que se retrasa la salida a la crisis económica.
Pero además, en esta ocasión, se pretende justificar por la reducción de los coste sociales de las empresas, con lo que gran parte del hipotético mayor ingreso del impuesto se vería reducido por la rebaja de las cotizaciones sociales, con lo que el posible efecto beneficioso de la subida impositiva se neutralizaría, pero el incremento del desempleo y el retraso de la salida de la crisis económica permanecería.
Decía Cristóbal Montoro, Ministro de Hacienda, durante la defensa de los presupuestos Generales del Estado que no había alternativa a lo recortes. De nuevo nos mienten y nos pretenden tratar como tontos. El déficit no se reduce solamente mediante el recorte del gasto público, sin también mediante el incremento de los ingresos; a través de la lucha decidida contra el fraude fiscal y la economía sumergida y no haciendo amnistías fiscales. Haciendo un reforma de nuestro sistema impositivo (10 puntos inferior a la media europea), eliminando subvenciones y deducciones al Impuestos de Sociedades, haciendo que la iglesia católica pague el IBI por sus edificios y reduciendo la aportación que el estado le da todos los años. En definitiva hay otras alternativas pero estamos ante un problema en el que prima mas las motivaciones ideológicas que las motivaciones económicas y sociales.
Hay que pararles porque la política económica del P.P. solo tiene un término que es llevar el país al desastre económico y social. Mañana es el 1º de mayo un día de lucha y reivindicación hay que darles una contundente repuesta antes de que sea demasiado tarde. A pesar de las amenazas de la gamberra presidenta de Madrid hay que salir a la calle ahora que todavía es legal.
Salud, República y Socialismo