Hoy he tenido que hacer una gestión en el INEN, a ese al que también va de vez en cuando mi amigo Rafa, y he podido comprobar en mis carnes lo desesperante que es tratar con la administración.
Previsor de mi, he llegado tempanito a la siniestra oficina y como premio me corresponde en nº 2. En el punto de atención 5 funcionarios prestos a atender los aburridos problemas de los sufridos parados de este país. Cinco minuto a más tarde llaman al nº 1, un emigrante del este que en la cola ya se me había quejado que el día anterior estuvo más de tres horas para que le atendieran y como le faltaba un papel, pues el “vuelva Vd mañana”. Iluso de mí pienso que de inmediato otro funcionario marcará mi número y rápidamente terminaré la gestión. Acabada su gestión el nº 1, la funcionaria se levanta y se va no se a donde, y aparece a los cinco minuto; y yo me digo, ya me toca. Pues no, se sienta tranquilamente en su mesa a hacer sus quehaceres y yo a esperar.
Solamente pasado casi 20 minutos aparece en el monitor mi número, el 2. Otra funcionaria distinta decide que ya es hora de atender a los sufridos parados. De inmediato le pregunto porque no se atiende con más agilidad, la respuesta es que además de atender a sufridos parados, ellas tienen otras cosas que hacer.
Es indecente que cuando un parado, y yo no me considero como tal sino un privilegiado prejubilado de una multinacional, tiene que hace la más mínima gestión sobre su situación, tenga que perder tres o cuatro horas esperando por la decidía de la administración y en parte también por la desidia de algunos funcionarios. Deben de pensar que como los parados no trabajan, pues que mejor forma de perder su tiempo que estar esperando en una oficina hasta que la administración tenga a bien a tenderles.
Mi gestión era saber por que después de tres meses inscrito como parado en el INEN, todavía no he recibido la notificación de cual va a se la cuantía de mi prestación, ni por supuesto he comenzado a cobrarla. Después de la consulta telemática, la funcionaria me dice que el único problema es que hasta el 15 de marzo no se había grabado mi solicitud. ¿Cómo es posible que una simple grabación de datos tenga que esperar dos meses y medio para realizarse y otro mes más como mínimo para empezar a cobrar? Ya he dicho anteriormente que soy un privilegiado, y que lo importante lo cobro de mi empresa, por lo que no cobrar la prestación de desempleo no representa un problema. Pero ¿Qué le puede significar esa misma mala actuación a un parado de verdad? Casi cuatro meses sin cobrar por desidia de la administración. ¿Es lógico y decente tener sin ingresos, por culpa de una mala organización, a personas que no tiene otros medios para vivir que la prestación de desempleo?
Me parece que todas las personas merecen un trato digno ante la administración independientemente de su estatus social. Si es por falta de plantilla, increméntese; y si es por mala organización, que también, pues establézcanse otros criterios de atención, como por ejemplo la cita previa y agilícense los tiempos de solucionar los tramites administrativos. La administración no es ajena a estos problemas, porque son cotidianos y las reclamaciones numerosas, llegando a veces a crearse conflictos entre los usuarios del INEN y los funcionarios, teniendo que intervenir el personal de seguridad. Es simplemente una completa desidia, como ocurre en otros estamentos de la administración publica.
Este es un reto que debería afrontar el nuevo gobierno, dignificar la relación de la administración con los ciudadanos, que al fin de cuantas somos los que pagamos sus salarios.
Salud, República y Socialismo.