Ana Botella, a la que un día le regalaron la alcaldía de Madrid y cuyo mayor logro político es ser la mujer de Josemari; ha demostrado su valía política, mejor dicho su ineptitud política, en su primer debate del estado de la ciudad de Madrid.
Las meteduras de pata de la Botella han sido monumentales. Desde afirmar que IU gobierna con el PSOE en Asturias hasta llamar tripartido al gobierno de dos partidos, pasando por su desconocimiento en materia de empleo, financiación de los entes locales y autonómicos o incluso desconocer el ideario político de su propio partido. Un claro ejemplo de lo que representa, en ocasiones, la llegada a la política por la vía marital.
Si no fuera porque los madrileños no se merecen una alcaldesa tan tonta y tan falta de tablas políticas, sería objeto de risas. Será divertido ver como la destrozan en un debate electoral. Aunque no creo que el P.P. corra ese riesgo y la desplazarán por un o una paracaidista, o no habrá debate.
Salud, República y Socialismo
2 comentarios:
jO, yo sabía que era tonta, pero ¿tanto?
Efectívamente, es idiota.
La pena es que no me hace nada de gracia.
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