Con el resultado de la consulta sobre el acuerdo PSOE-Ciudadanos, Pedro Sánchez ha conseguido su objetivo principal, salvarse. Con el casi 80% de votos afirmativos en la consulta, Sánchez se consolida en la dirección del PSOE y hace callar a sus críticos barones.
Yo creo que ese era el objetivo principal del acuerdo con Ciudadanos. Pedro Sánchez era consciente que solo un acuerdo que le permitiera retomar la iniciativa, tanto en el interno de su partido como de cara al electorado, le posibilitaría salir airoso del cerco al que le estaban sometiendo su barones partidarios del gran pacto con el PP.
No le niego a Pedro Sánchez el valor político necesario para asumir una apuesta tan arriesgada como asumir el reto de intentar logar la investidura que el cagón de Rajoy se negó a asumir. Pero era la única alternativa, asumir el reto o afrontar la desfrenestración política que le tenían preparada los suyos. Pero el tiempo demostró que no estaba dispuesto a un acuerdo con la izquierda parlamentaria, porque le era más fácil conseguir ese acuerdo con el centro derecha de Ciudadanos. Lo importante era presentaran un pacto a la militancia que desactivara las intrigas palaciegas. Y lo ha conseguido, aunque conseguir la investidura sea otro cantar.
En este proceso no ha habido actitud positiva por llegar a un acuerdo de izquierdas. Primero porque Pedro Sánchez no perdió ni un segundo en montar una mesa de negociación con Ciudadanos, dejando a un lado a Podemos mientras si que negociaba con Compromis y con IU-UP. Y segundo porque a Pablo Iglesias y a Podemos solo le ha interesado el postureo, la foto mediática y las declaraciones grandilocuentes. Si de verdad estaban interesados en negociar, ¿no hubiera sido más comprometedor proponerle a Pedro Sánchez, desde el primer día, los miembros de la comisión negociadora de Podemos? De esta manera hubiera quedado en evidencia quien quería negociar y quien no. No se tiene más talante negociador exigiendo ministerios y vicepresidencias. Pablo Iglesias ha estado mareando la perdiz hasta que la negociación se tornaba imposible por falta de tiempo. Porque parece que interesaba más provocar nuevas elecciones que llegar a acuerdo programáticos.
El acuerdo alcanzado entre PSOE y C's es incorrecto en las forma e
insuficiente en el contenido. Incorrecto en las formas porque no son maneras presentar un acuerdo cerrado con una formación política para que el resto de los hipotéticos aliados lo acepten como un trágala. Y sobre todo presentarlo como un chantaje, si no se apoya el acuerdo se posibilitar que Rajoy y el PP vuelvan a gobernar. Eso es lo que estuvo haciendo Rajoy durante toda la pasada legislatura. Y eso no es sumar es simplemente poner entra la espada y la pared a los posibles a aliados. Unos posibles aliados que suman mas que con quien se ha hecho el acuerdo. Por eso es comprensible que Podemos no acepte un acuerdo en el que no ha participado y que Compromis e IU-UP renuncien a los acuerdos alcanzados con el PSOE porque el contenido de lo negociado con C's desvirtúa lo que ellos negociaron.
insuficiente en el contenido. Incorrecto en las formas porque no son maneras presentar un acuerdo cerrado con una formación política para que el resto de los hipotéticos aliados lo acepten como un trágala. Y sobre todo presentarlo como un chantaje, si no se apoya el acuerdo se posibilitar que Rajoy y el PP vuelvan a gobernar. Eso es lo que estuvo haciendo Rajoy durante toda la pasada legislatura. Y eso no es sumar es simplemente poner entra la espada y la pared a los posibles a aliados. Unos posibles aliados que suman mas que con quien se ha hecho el acuerdo. Por eso es comprensible que Podemos no acepte un acuerdo en el que no ha participado y que Compromis e IU-UP renuncien a los acuerdos alcanzados con el PSOE porque el contenido de lo negociado con C's desvirtúa lo que ellos negociaron.
Y es insuficiente en el contenido porque no sirve para abordar los problemas de la gente a pie. Porque la exclusión social no afecta solo a los 750.000 personas que dice Pedro Sánchez que le va a tocar la renta de inserción, si no a mas de 2 millones de trabajadores que no tienen ingreso alguno. Porque para conseguir una renta de inserción universal hay que subir los impuestos a quien más tiene, Porque bajar o mantener el actual nivel impositivo no es de izquierdas, sobre todo cuando nuestro nivel impositivo es de los más bajos de la UE.
Porque es mentira que se vayan a derogar las leyes que nos han quitado derechos y sometido a recortes con el gobierno del PP. Porque con los nuevos contratos se pretende igualar las condiciones laborales a la baja. Mala manera de eliminar la dualidad del mercado laboral español. Porque se sigue rebajando el coste del despido y se siguen manteniendo excesivos poderes a los empresarios en la negociación colectiva.
Ante esto solo quedan dos opciones. Una que el PSOE negocie la inclusión de propuestas progresistas con Podemos, las confluencias, Compromis e IU-UP o esperar la celebración de nuevas elecciones. Yo creo que Pedro Sánchez se conformará con haber salvado al soldado Sánchez y esperará pacientemente la repetición de la EEGG. Quizá sea el mal menor dado con que la actual composición del Parlamento no se podrán llevar a cabo muchas de las propuestas del acuerdo, por el veto que impondría el PP. La convocatoria de nuevas EEGG junto con el creciente y permanente nuevos casos de corrupción del PP, podrían posibilitar una nuevo composición parlamentaria mucho más favorable a reformas progresistas. Aunque para ello es necesario que de una vez los votantes populares se den cuenta que el PP no es un partido sino una trama criminal de corrupción y que el lugar que le corresponde es fuera de las instituciones publicas.
Salud, República y Socialismo