La lideresa del PP madrileño ha dimitido, pero es una dimisión con retranca. Pretende dar lecciones de ejemplaridad y responsabilidad política y pone su mirada en Rajoy.
Aguirre sigue insistiendo en que no le consta financiación ilegal alguna en el PP, pero cuando afirma que "El hecho de que el juez lo mantenga en prisión (a Granados) tanto tiempo algo nos hace pensar que algo grave debió de haber hecho", ya no pone en duda que haya habido financiaron ilegal aunque ella haya ido de oyente en la presidencia del PP madrileño.
Pero como ella no es la de las que se van si armar ruido, le suelta una andanada a Rajoy en toda la linea de flotación. Dice Aguirre que "La corrupción nos está matando a todos. La gente no quiere más, la gente quiere gestos y mi gesto es asumir la responsabilidad política". Rajoy debe haberse dado por aludido porque ya no dice eso de "Esperanza se fuerte" como le decía a Bárcenas. Ahora tan solo le ha dicho, Esperanza te comprendo.
Esperanza ha colocado en un aprieto a Rajoy y a Rita Barberá. Porque si ella ha dimitido por responsabilidad política, a pesar de que no le consta, Está poniendo en irresponsabilidad política a Rita por no asumir su responsabilidad en Valencia y a Rajoy por no asumirla a nivel nacional. Dice, Aguirre, que asume sus responsabilidad política "por no haber vigilado bien lo que pasaba en el partido ". Y es una reflexión acertada, pero una reflexión envenenada porque le está diciendo a Rajoy y a Rita que ellos tienen que dimitir por lo mismo, por no haber vigilado que se hacia en el partido. Es una manera muy fina de decir que son responsables de la corrupción que ha crecido como las setas en el Partido Popular.
Rajoy lo tiene muy difícil. Aunque sabiendo como es tratará este problema como ha tratado otros, esperando que el tiempo lo solucione. El problema es que el tiempo se le acaba a Rajoy y se hace muy complicado explicar por que él no asume la responsabilidad "in vigilando", como la ha asumido Esperanza Aguirre. Porque si Esperanza tiene su Granados, Rajoy tiene su Bárcenas, su Matas, su Rita, su Fabra, su Ruz, y un largo etcétera de corruptos.
Todos con lo que Rajoy se ha solidarizado o quería ser de mayor como ellos han caído. Están en la cárcel o esperando juicio para entrar en ella. Por eso Rajoy es ya un cadaver político. Rajoy unió su suerte a ellos cuando los elogiaba y por tanto debe asumir su responsabilidad, porque tienen muchos Granados. Pero no solo por eso, si no porque el Partido Popular está siendo investigado por financiación ilegal y por obstrucción a la justicia. Cuando se es presidente de un partido, que según los jueces es una organización criminal, se tienen que tomar responsabilidades políticas y la única posible es la dimisión, por eso la dimisión de Esperanza Aguirre, que ya tenía sus días contados, ha puesto a Rajoy en una situación muy difícil, casi insostenible.
La dimisión de Aguirre, que es perra vieja, tiene otro objetivo, llevarse por delante a Rajoy. Demos tiempo al tiempo y veremos si lo consigue.
Salud, República y Socialismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario