Nos tienen acostumbrados a su intransigencia, su totalitarismo, sus imposiciones doctrinales, y su desmedido afán por los privilegios. Pero algunos sobrepasan estos limites, pisoteando sus propios códigos de valores. Es el caso del sacerdote Jesús Calvo.
A raíz del anuncio de Pedro Zerolo, secretario de Movimientos Sociales del PSM y concejal en el ayuntamiento de Madrid, de padecer un cáncer, este energúmeno fascista manifiesta que ese cáncer es un castigo divino, para decir a continuación que "no cambiaría la vida de mi perro por la de Pedro Zerolo". En eso estoy de acuerdo, la vida de mi perra vale más que la suya, porque mi perra es un animal noble y este animal no tiene ni los sentimientos de caridad cristiana que le manda su religión. Pedro Zerolo es una persona con la que se pueden tener diferencias políticas, pero nadie le puede negar su lucha por los derechos civiles y de igualdad de las personas, independientemente de su sexo. Y su enfermedad solo merece la solidaridad de cualquier demócrata y el deseo de un pronta recuperación.
Lo del castigo divino debe ser una obsesión enfermiza, porque de Adolfo Suárez, aseguró que “lo que le ha pasado en vida es un castigo divino”. Si su dios existiera, lo que sería un castigo divino sería su propia existencia. Personas como estas nos deberían estar circulando libremente por la calle, ya que son un peligro para la sociedad, ni tan siquiera en un centro penitenciario. Si ubicación lógica sería en un centro psiquiátrico.
No es de extrañar que este fascista eche tanta mierda por su boca siendo capellán de La Falange, colaborador de Fuerza Nueva y líder espiritual del conjunto de la extrema derecha española. No solo se jacta de sus burradas sino que afirma que “la mayoría de los sacerdotes piensan igual que él y además se siente respaldado por Rouco Varela” . Admirador de Franco a quien le agradece que librase a España de convertirse “en un gulag ruso, en una Cuba, una Chechenia o en una Albania”. Como no podía ser menos este cura defiende que "la pena capital, la pena de muerte, es doctrina católica y que habría que eliminar a mucha gentuza”. A lo mejor se refería a él mismo.
Que este energúmeno fascista siga siendo un miembro de la iglesia católica, dice mucho de la realidad de la jerarquía de la misma en España, que ni persigue a estos individuo ni a los miles de delincuente sexuales y económicos que están entre sus filas. Pero en fin esto es lo que hay y además nos reafirma en seguir luchando por la laicidad del estado y la separación iglesia/estado, ya que son una lacra social y un ejercito de parásitos sociales.
Salud, República y Socialismo
1 comentario:
Ese fascista con alzacuellos no difiere nada de la empresa en donde presta sus trabajos de por vida: La Internacional Vaticanista (IV).
La Internacional Vaticanista es un partido político de ámbito internacional guiado por una ideología fascista, o si queremos suavizarlo, de extrema derecha.
¡Qué nos puede sorprender de lo que digan ellos!
Lo sorprendente es que una enorme cifra de españoles están volcados o al menos cobijados bajo su paraguas "milagroso" y "protector".
Lo jodido es la cantidad de gentes que se dicen de izquierdas, progresistas, de centro-izquierda, socialdemócratas, izquierdistas unidos y demás fauna ibérica, que no acaban de dar las espaldas de una puta vez a la institución fascista religiosa.
Algunos tienen a bien pertenecer a cofradías para lucir su palmito o su capirote en su gran fiesta anual de la Semana Santa.
Eso; eso es lo más jodido. (!!!!!!!)
El día que todos los de izquierdas, casi todos los tibios y centristas y algunos demócratas de derechas, estén dispuestos a dar la espalda a esa peligrosa institución político-religiosa, no habrá necesidad de correr a gorrazos a esos curas fascistas y bocazas.
Pero mientras toda esa pléyade de españoles aludidos les siga llamando "padres" o "madres" en lugar de curas o monjas, seguimos estando perdidos los cuatro ateos que andamos por ahí...
Salud, República e Izquierdismo
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