La burrada de la semana, Monserrat Gomendio

Cuando los gobernantes son incapaces de responder o dar una alternativa a las movilizaciones de los ciudadanos y huelgas de los trabajadores, se recurre a la descalificación. Es habitual el recurso del Partido Popular al apelativo de "política" cuando se pretende descalificar una huelga justa de los trabajadores.

Monserrat Gomendio, Secretaria de Estado de Educación, ha dado un nuevo paso en el hábito de la descalificación de las movilizaciones cuando se es incapaz de dar alternativas a la justa lucha de la comunidad educativa contra la LOMCE.  Para Monserrat Gomendio la huelga de la comunidad educativa contra la LOMCE del pasado día 24 es una farsa porque según ella la movilización "se disfraza de huelga para reclamar subidas salariales y disminución de la carga lectiva para los docentes".

No tiene ningún reparo en mentir para intentar descalificar el verdadero sentido de la movilización, porque en primer en ningún sitio se reivindica reclamación alguna en materia  salarial o laboral y en segundo lugar no es una protesta del profesorado contra la LOMCE, si no una movilización ciudadana contra los planes del ministerio de Educación. Los profesores no han estado solos, se han movilizado, codo con codo, con alumnos, estudiantes, padres y la ciudadanía. Porque el problema educativo no es un problema exclusivo del profesorado, es un problema que incumbe a toda la sociedad.

El objetivo de Monserrat  Gomendio era claro, dividir y enfrentar al profesorado contra el resto de la comunidad educativa. Intentar hacer creer que el profesorado es un colectivo insolidario que defiende exclusivos intereses corporativos. Pero no ha colado, porque el profesorado de la educación pública lleva mucho tiempo demostrando que por encima de sus interese laborales están los intereses de la enseñanza pública. Y además, les ha salido el tiro por la culata, porque tanto la huelga como el resto de las movilizaciones han sido un éxito de participación.

Abusarán de su mayoría absoluta y totalitaria e impondrán una reforma educativa que solo responde a los principios ideológicos del P.P. y a los intereses de la educación privada y la iglesia, pero no conseguirán mejorar la educación pública porque no es ese su objetivo.

El objetivo del P.P. es deteriorar la educación pública  y hacer inviable el acceso a la educación superior de los más desfavorecidos,  para conseguir perpertuarse en el poder político y económico. El nuestro debe ser crear las bases para conseguir echar del poder al Partido Popular.

Salud, República y Socialismo.