Estos idiotas que nos gobiernan, nos quieren tomar por tontos

Miguel Ángel Fernández Ordoñez, ex Gobernador del Banco se España, se caracterizó no por hacer su trabajo, controlar la salud de los bancos y sus consecuencias (la burbuja inmobiliaria) sino por meter las narices en la legislación laboral española. Sus permanentes peticiones de recortes de derechos laborales, bajadas de  salarios y diminución de la  indemnización del despido fue la impronta que dejó a su paso por el BE.

Ahora parece que su colega en el BCE, Mario Draghi, le ocurre lo mismo, su obsesión son los salarios y el coste del despido. El BCE pronostica que como consecuencia de la reforma laboral introducida por el gobierno del P.P. los costes salariales tendrán una acusada caída en el futuro. A pesar de ello recomienda que se introduzcan nuevos medidas encaminadas a reducir los costes salariales. Entre ellas demanda rebajar el salario mínimo interprofesional y el coste de los despidos. Es decir mas ajustes y mas recortes, como si no fueran suficientes los ya realizados.

Pero además el BCE, en su boletín del mes de agosto, afirma que las políticas de austeridad y de recortes están profundizando las consecuencias de la crisis económica, las recesiones en los países del sur se incrementan  y que la cartera de pedidos de la industria alemana está cayendo (1,7% en junio, con una previsión del 8% a final de año). Será muy presidente del BCE y también exvicepresidente, por Europa, con cargo operativo, de Goldman Sachs, una de las entidades financieras responsables de la crisis económica, pero es un perfecto idiota o se lo hace. Porque después de 5 años de aplicar las mismas políticas de recortes y cada vez mas con el agua al cuello hay que se muy idiota o muy HDGP para seguir insistiendo en las mismas políticas que solo están causando miseria, desempleo, incremento de la recesión y aumento de las desigualdades sociales.

El aspecto bueno de todo esto es que, como consecuencia del incremento de la recesión en los pases del sur de Europa, Alemania está empezando a sufrir las consecuencia de la medicina impuestas a los países con dificultades. Posiblemente será el próximo país europeo en entrar en recesión. Hace unos días se jactaba Rajoy de que la balanza de pagos con Alemania, por primera vez en muchos años, era favorable a España. Es decir que Alemania compra a España mas de lo que nosotros le compramos a ellos. Y se quedaba tan ancho. La razón de que la balanza sea favorable a España es que Alemania sigue comprando lo mismo a España pero nuestro país compra menos a Alemania. La crisis, con la caída del consumo, hace que los españoles consumamos menos y Alemania como no podía ser de otra manera se resiente en sus exportaciones. Pero Rajoy lo daba como una buena noticia. Que la vamos a hacer, es lo que tenemos, no da mas de sí. Porque que España compre menos a Alemania es, en estos momentos, malo para España y malo para Alemania, porque significa que las cosas van peor en España, pero también empiezan a ir mal en Alemania.

Cuando la Merkel se de cuenta de que sus recetas tienen un efecto bumerán en la economía de su país, posiblemente, llegará a la conclusión que el BCE tiene que tener las competencias completas de un banco central y que o se incentiva la economía y se eliminan los recortes o nos hundimos todos. Cuanto antes entre en recesión Alemania, mejor para todos.

Salud, República y Socialismo.