La huelga general continua sumando apoyos y adhesiones

A medida que se acerca el 29M aumentan los apoyos a la huelga general convocada por CCOO y UGT contra la regresiva reforma laboral, impuesta por el Gobierno de Mariano Rajoy.

Personalidades del mundo de la cultura, la universidad, la Unión de Actores, jueces, inspectores de Trabajo, ONG, asociaciones vecinales y de la sociedad civil, de jóvenes, feministas, LGTB, de inmigrantes, ecologistas, formaciones políticas de izquierda, sindicatos y numerosos colectivos de profesionales han suscrito manifiestos de rechazo unánime de la reforma y de solidaridad con los sindicatos en el ejercicio de sus reivindicaciones, frente a la campaña de desprestigio iniciada contra el movimiento sindical.

Quedan menos de tres días para la huelga general y los actos de apoyo y respaldo a las reivindicaciones y lucha de los sindicatos van en aumento. 

Una amplia complicidad social que, como se puso de manifiesto en el acto celebrado en el Ateneo de Madrid con representantes de la cultura y la universidad, puede interpretarse como el anuncio de una participación masiva en la huelga general. Un acto de adhesión en el que participaron las escritoras  Almudena Grandes, Lourdes Ortiz y Marta Sanz; los escritores Luis García Montero, Juan José Millás, Eduardo Mendicutti;  cantantes como Miguel Ríos; los actores Juan Diego, Juan Manuel Seda, Jorge Bosso, Vicente Cuesta; las actrices Esperanza Elipe y Pilar Bardem; los catedráticos Antonio Baylos, Santos Ruesga, o el ex rector de la Universidad Complutense de Madrid, Carlos Berzosa, entre otros profesionales de la culltura y el espectáculo. También,  desde Argentina, donde se encuentran de gira,  los cantautores Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina enviaron sendos vídeos
de respaldo a la convocatoria de huelga.

En la recta final del 29M, CCOO ha intensificado, en toda la geografía española, su campaña de información para trasladar a los centros de trabajo las razones del rechazo a la reforma laboral del Gobierno, enmarcada en un ataque sin precedentes al Estado de bienestar y a los servicios públicos que va a provocar más recesión y paro.

El Gobierno no ha conseguido engañar a la gente a la hora de vincular la reforma a la lucha contra el paro. Los trabajadores y trabajadoras, y la ciudadanía en general, se han dado cuenta de que esta reforma no sirve para resolver la crisis y el paro; al contrario, es la mayor agresión a los derechos de los trabajadores y trabajadoras desde la democracia, y sólo servirá para abaratar el despido, anular la negociación colectiva e individualizar las relaciones laborales.

La reforma laboral debilita el derecho del trabajo y lo reemplaza por una ilimitada arbitrariedad empresarial; no reduce las modalidades de contratación y por el contrario las aumenta y precariza; introduce discriminaciones entre las personas en paro en las posibilidades de empleo; rompe el equilibrio de la negociación colectiva; y abre las puertas al despido, por primera vez, en las Administraciones Públicas.

Pero, además, asesta un duro golpe a nuestro modelo social, a los pilares del Estado de bienestar: la sanidad, la educación y las políticas sociales.

Ahora más que antes esta justificada esta huelga general. Tras el avance de la izquierda en la elecciones autonómicas del pasado fin de semana, que han evidenciado un rechazo a las políticas de recortes sociales y laborales del gobierno del P.P. se hace necesario realizar un último esfuerzo para tratar de convencer a los indecisos para que secunde la huelga general, porque de su éxito puede depender el poner fin a la política de recortes del Partido Popular.

Salud, República y Socialismo.