De vuelta a Tánger, desde Chauen, enlatados en nuestro taxi, decidimos parar en Tetuán; primero para poder estirarnos un poco y segundo para poder ver un lugar que nos recomendaron, su Medina.
La Medina de Tetuán, patrimonio de la humanidad, es una joya de la cultura musulmana, con calles sinuosas, bonitas plazoletas, pardos muros, callejas de embrujo largas y estrechas, rincones y grandes puertas, que atraen la curiosidad. Esta Medina es más grande que la de Tánger, por lo que creo que es menos asequible para el que no la conoce, porque es más fácil perderse por ella. También es diferente, al menos en mi apreciación o quizás por la parte de la Madrina de Tetuán que yo contemplé. Me dio la sensación que la Mediana de Tánger esta más hecha para vivir que la de Tetuán que me pareció más dedicada al comercio.
La Medina de Tetuán es para verla, pasear por ella, adentrarse en sus rincones, contemplar sus celosías, pararse a disfrutar de los olores de las especias, pan y las pastas recién sacadas del horno, descubrir nuevos callejones, sentarse a tomar un té, contemplando los ancianos, hablar con sus habitantes, en fin perderse por sus calles observando su variado ambiente, aunque para eso hay que dedicarle tiempo, no un par de horas de vueltas de Chauen. Y además ser un poco atrevido por la facilidad con la que un desconocedor de la Medina, puede perderse en la multitud de callejas que constituyen la Medina.
Amurallada en casi su totalidad, esta jalonada por una serie de torreones o Boch, una fortaleza y dominada por la Alcazaba. En la parte mas alta de la medina dominando la ciudad destaca la Alcazaba de los Adives, cuadrilátero irregular con dos bastiones adosado al antiguo cuartel de regulares, junto a ella las tumbas de los Mullaidines, fundadores de la ciudad.
La salida de la Medina fue horrible, porque siendo domingo parece que la atracción de los tetuanenses es pasear por sus calles, por lo que la puerta por la que salimos estaba totalmente abarrotada de personas que entraban y salían de la Medina, aunque como recompensa pudimos contemplar el palacio real del rey de Marruecos, uno de los muchos que tiene para su uso privado.
Mi consejo quedarse un par de días en Tetuán para poder disfrutar de paseos tranquilos por las callejas de la Medina de Tetuán, y ha ser posible no en fin de semana que se pone bastante intransitable.
Y como mañana no voy a poder estar con vosotras y vosotros, aqui os dejo mi pequeños homenaje al 77 aniversario de la proclamacion de la II República española.
Y que la III República llegue mas temprano que tarde y todas y todos la podamos disfrutar. Que os gusten las nuevas fotos.
Salud, República y Socialismo.
5 comentarios:
Buenas tardes Antonio;
Es magnífico poder seguir este recorrido por la Medina de Tetuán con las preciosas fotos que acompañan el texto...
Chapeau!
Un beso.
Preciosas fotos, me encantan esas callejas estrechas tan típicas.
Bueno que mañana pases un buen día.
Fantástico post, por si no tenía yo pocas ganas de viajar...pasa un buen día.
Salud, Paz, amor y República
Que barbaridad, parece Vd. el Phileas Fogg de la blogsfera. Pretende dar la "Vuelta al Mundo en 80 entradas". Aunque la verdad es que no le veo yo en plan caballero inglés decimonónico perteneciendo a clubes selectos.
Otro viaje interesante. Lo bueno de estos es, aparte de lo que nos muestre usted, que me hacen tener curiosidad por los sitios que nos muestra y me lanzo a la red a buscar información de ellos. Se complementan bien sus entradas, sus fotos y lo que encuentro en la red.
Esta Medina me ha dado la sensación de ser más agobiante, más cerrada. No se si es sensación mía o tal vez los ángulos de toma de las fotos. He tenido una cierta impresión de ahogo que ha desaparecido cuando han llegado las fotos de los espacios abiertos. Pero muy interesante el paseo por la Medina, y muy lleno de vida.
Como en otras ocasiones también voy a seleccionar una foto de entre todas. Aunque quede claro que todas merecen la pena. Esta vez selecciono la que nos muestra la ciudad subiendo por la colina, creo que es la penúltima. Estéticamente es preciosa, como en otras fotos me recuerda a esos pueblecillos mediterráneos encaramados a una colina. Aunque vaya a usted a saber, tal vez la haya seleccionado por la sensación de amplitud que ha hecho que me quite de encima el agobio sentido en la medina.
Un saludo catorceabrilesco.
Hola a todos/as
Despues de haber pasado ayer por el quirofano, para arreglar un pequeño problema en las fosas nasales, estoy de nuevo contestando vuestros comentarios, aunque con las fosas nasales todavía congestionadas. Espero que a partir del jueves ya me encuentre perfectamente bien.
Selma
Me agrada que te guste siendo tu la experta en cultura arabe.
Mª Eugenia
La verdad es que es un placer pasear por todas esas callejas, aunque hay que hacerlo despacio, no con prisas como yo lo hice.
Fritus
Ese es el objetivo de esta serie de entradas, hay mucho que ver ahí fuera; y si con mis fotos contribuyo a ello, mejor.
Adanero
No creo que llegue a realizar la experiencia de Phileas Fogg, aunque ya me gustaria, porque cumpliría dos de mis grandes aficiones: viajar y hacer fotos.
La Medina es agoviante cuando se llena de gente por la estrechez de sus calles, pero cuando es moderada la presencia de personas se disfruta más de los paseos por ella, porque la gente también forma parta de la Medina.
Salud, República y Socialismo
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