Según Amnistía Internacional, 135 millones de mujeres ya han sido mutiladas y la cifra aumenta en dos millones cada año Para concienciar a la ciudadanía y sobre todo a los gobiernos, para que luchen contra esta lacra, hoy se conmemora el Día Internacional de Tolerancia Cero a la Ablación.
La presión social, la incultura y la influencia religiosa del islam, aunque no tenga ningún sustento en el Corán, hace que a día de hoy, sobre todo en 28 países africanos se continúe con esta terrible práctica. Una práctica que deja terribles secuelas de por vida a las niñas a las que se las somete a estas mutilaciones.
Pero desgraciadamente no es solo un problema tercermundista. En Europa, el Parlamento Europeo calcula que 500.000 mujeres y niñas que viven en Europa sufren las consecuencias permanentes de la mutilación genital femenina y otras 180.000 corren peligro de ser sometidas a esta práctica cada año. Y en España se calcula que alrededor de 10.000 están en peligro de ser sometidas a la ablación.
Las visitas a familiares en esos países son utilizadas con frecuencia para practicar esta mutilación, a pesar de estar perseguida esta práctica aunque se realice fuera de la UE. La crisis también está influyendo, ya que el empeoramiento de la economía incita al retorno y muchas mujeres se enfrentan a ser mutiladas, porque si no, son consideradas “impuras, con tendencia a la promiscuidad” o tienen dificultad para “conseguir marido”.
Aunque algo se está avanzando. En algunos países europeos se ha tipificado como delito esa práctica y se persigue a quienes lo realizan dentro o fuera de las fronteras europeas. En algunos países africanos se comienza a perseguir esta práctica. Pero no es suficiente. Mientras la cifra de niñas en peligro de sufrir una ablación sea tan vergonzosamente elevada, no se estará ganando la batalla contra esta brutal agresión que hace que miles de niñas puedan morir desangradas o a causa de infecciones, mientras que aquellas que sobreviven a la agresión pasarán toda su vida con graves secuelas.
Salud, República y Socialismo.
3 comentarios:
Magnífico tu post sobre este tema fundamental para las mujeres y para la civilización. Un abrazo fuerte!
Una salvajada. No se puede consentir este sufrimiento por ningún motivo. Es un signo más del machismo imperante, de la degradación de la mujer y del fanatismo religioso.
Salud y República
Mientras la mujer siga aceptando el papel secundario que otorgan religiones, parece difícil poner punto final a su degradación.
Saluds
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