Bush se va. No le queda ni una semana, y a partir de entonces el mundo podrá respirar un poco mejor. Un presidente sanguinario pasará a la historia sin haberse arrepentido de sus múltiples errores y con la sangre de muchos inocentes sobre su conciencia.
Y ahora que se va, condecora a sus más fieles servidores, a los que sin pestañear le han seguido en sus sangrientas aventuras. Condecora al ex primer ministro británico Tony Blair y al australiano John Howard, ambos fervientes defensores de sus tropelías en Irak y condecora, también, al presidente colombiano Álvaro Uribe, valedor de sus intereses en el patio trasero de los EE.UU. Y según la portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino, han sido condecorados por haber sido "firmes aliados" de EE.UU., en particular en la lucha contra el terrorismo. "Sus esfuerzos para llevar la esperanza y la libertad a la gente de todo el mundo han hecho de sus países, de Estados Unidos y de la comunidad mundial un lugar más seguro". Y se queda tan ancha. Como si el mundo fuera hoy un lugar más seguro después de paso de Bush por la Casa Blanca.
Y el amigo americano o es olvidadizo o no premia a mindundis, porque falta uno. Falta el bajito del trío de las Azores, el marido de la Botella. Que triste debe de estar, después de los grandes esfuerzos que él hizo para satisfacer al amigo americano. Que terrible es que ahora no le reconozcan el apoyo sin paliativos a las mentiras de Bush, la defensa a ultranza de una guerra injusta y de los miles de muertos civiles causados por la ceguera de un loco. El, además, iba un paso más adelante; cuando hasta el propio Bush reconocía el engaño de las armas de destrucción masiva, él seguir con su cruzada particular, pues haberlas ahílas aunque no aparecieran. No se dio cuenta de que él era solo un advenedizo que fue utilizado por el imperio en defensa de unos intereses espurios.
Solo le va a quedar el recuerdo de los pies encima de mesa fumando un puro con su amigo Bush y la foto de las Azores, mientras que el “honor” queda para otros.
De nuevo la historia se repite y Roma, digo el imperio, no paga traidores.
Salud, República y Socialismo.
Y ahora que se va, condecora a sus más fieles servidores, a los que sin pestañear le han seguido en sus sangrientas aventuras. Condecora al ex primer ministro británico Tony Blair y al australiano John Howard, ambos fervientes defensores de sus tropelías en Irak y condecora, también, al presidente colombiano Álvaro Uribe, valedor de sus intereses en el patio trasero de los EE.UU. Y según la portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino, han sido condecorados por haber sido "firmes aliados" de EE.UU., en particular en la lucha contra el terrorismo. "Sus esfuerzos para llevar la esperanza y la libertad a la gente de todo el mundo han hecho de sus países, de Estados Unidos y de la comunidad mundial un lugar más seguro". Y se queda tan ancha. Como si el mundo fuera hoy un lugar más seguro después de paso de Bush por la Casa Blanca.
Y el amigo americano o es olvidadizo o no premia a mindundis, porque falta uno. Falta el bajito del trío de las Azores, el marido de la Botella. Que triste debe de estar, después de los grandes esfuerzos que él hizo para satisfacer al amigo americano. Que terrible es que ahora no le reconozcan el apoyo sin paliativos a las mentiras de Bush, la defensa a ultranza de una guerra injusta y de los miles de muertos civiles causados por la ceguera de un loco. El, además, iba un paso más adelante; cuando hasta el propio Bush reconocía el engaño de las armas de destrucción masiva, él seguir con su cruzada particular, pues haberlas ahílas aunque no aparecieran. No se dio cuenta de que él era solo un advenedizo que fue utilizado por el imperio en defensa de unos intereses espurios.
Solo le va a quedar el recuerdo de los pies encima de mesa fumando un puro con su amigo Bush y la foto de las Azores, mientras que el “honor” queda para otros.
De nuevo la historia se repite y Roma, digo el imperio, no paga traidores.
Salud, República y Socialismo.
5 comentarios:
Hola, bien merecido lo tiene, además la historia está repleta de poderosos que han despreciado a los traidores, después de haberles ayudado a conseguir sus objetivos.Saludos.
Pobrecillo, ¿cómo te atreves? Lo estará pasando mal, estará llorando y tratando de olvidar pegado a su Botella y recordando la libertad que tiene de beber cuando quiera.
Y Bush, un desagradecido, con lo que ha hecho nuestro hombre por la Guerra.
Salud y República
Antonio: Toda la razón, con lo que le gusta el oropel, las medallas y los honores, Josemari estará bien jodido de que no se le reconozcan los servicios prestados en forma de condecoración...aunque ya se llevó lo suyo en forma de clases infumables en la universidad de Georgetown.
un abrazo
Ha sido el "Tonto útil" de otro "Tonto inútil" ¡Qué legado de sangre y muertes dejan él y todos sus cobardes amigos!...
¿Cambiará algo su marcha?
Me confieso escéptica, irremediablemente... inch'allah me equivoque...
Un beso Antonio.
Desencanto
Él que se jactaba de su buen amigo Bush, pues ahora su amigo el “arbusto” le ha dejado tirado.
Rafa
Con lo prepotente y soberbio que es, es como si le hubieran dado una patada en semejante parte.
Daniel
Ha quedado como un vil mamporrero, al que usan y luego lo abandonan. Y encima la medalla que le concedieron (comprada) en USA fue a costa del dinero de todos los españoles
Selma
No se cual de los tontos es más inútil, porque servir a un inútil ya demuestra su propia inutilidad.
Salud, República y Socialismo
Publicar un comentario