28 de marzo de 2011
Se quieren cargar el ya escuálido estado del bienestar. Unos, el gobierno, dice que las reformas son para poder mantener el estado del bienestar cuando lo único que hacen es degradar permanentemente las prestaciones. Pero otros lo empiezan a hacer de manera mucho más clara y tajante.
Hoy le ha tocado el turno al presidente de la comunidad de Murcia, Ramón Valcárcel del P.P. Lo ha dicho alto y claro y delante de su presidente, Mariano Rajoy, los servicios como la educación y la sanidad no pueden ser soportados por el presupuesto de una región ni por el presupuesto de una nación, por lo que los ciudadanos deben asumir esos costes. Y Don Mariano se ha quedado callado y dicen que quien calla otorga.
Después unos como González Pons lo matizan diciendo “esperamos que la mala política, la falta de medidas y los errores de Zapatero no acaben obligando a los españoles a pagar por aquello a lo que tienen derecho". Es decir que ellos no dudarían en imponer el copago si la mala gestión del PSOE obligara a ello.
Esta táctica es ya muy conocida, un kamikaze lanza una propuesta maximalista, un globo sonda, de esta manera se sondea la reacción de la ciudadanía y se actúa en consecuencia. El P.P. no cree en la sanidad pública ni en la enseñanza pública, allí donde gobiernan ponen todo su empeño en degradar los servicios públicos a la vez que se entrega grandes cantidades de dinero público a la incitativa privada. De esta manera ya están poniendo en practica lo que hoy se ha atrevido decir Valcárcel, los ciudadanos muchas veces se ven obligados a recurrir a la iniciativa privada par obtener servicios sanitarios o educativos de calidad que el deterioro de lo público impide obtener. Ya están pagando doblemente por un servicio al que tienen derecho a través de sus cotizaciones a la Seguridad Social y sus impuestos.
Ramón Valcárcel y el P.P. se equivocan no es el gobierno ni la comunidades autónomas quienes pagan los servicios públicos como la sanidad o la educación. Son los ciudadanos, fundamentalmente los trabajadores, a través de sus cotizaciones a la Seguridad Social y a través de sus impuestos los que soportan el gasto en sanidad y educación. Los gobiernos son meros gestores de esos ingresos y tienen la obligación de gestionar bien para que los ciudadanos no tengan la necesidad de pagar de nuevo por lo que previamente han pagado.
Esas constantes rebajas de impuestos que hacen tanto el P.P. como el PSOE solo benefician a los empresarios y a los que mayores ingresos tienen. Esto es lo que contribuye a que cada día que pasa los servicios públicos se degraden más, dado los menores ingresos que cada día entran en las arcas públicas.
Hay que estar atento, esto son solo indicios, pero indicios que indican muy a las claras cual puede ser el camino que seguirá el P.P. una vez instalado en el poder y lo peor es que lo justificarán en aras de preservar la sanidad y la educación publica. Los perjudicados serán los de siempre, los trabajadores.
Salud, República y Socialismo.
4 comentarios:
Curioso razonamiento el de estos mediocres(fruto del fracaso escolar) quien vale vale y sino a la política. Nosotros, como bien dices, lo pagamos todo. Los servicios nos pertenecen y lo que hacen es robarnos para darselo a los ricos(bancos y para los negocietes de los amiguetes ) bolsillos propios a parte, además, parece que los pobres ni nos enteramos.Seremos burr@s.
Saludos.
Y oí ayer al susodicho Valcarcel y haces muy bien en remarcar que esos servicios ya los pagamos los ciudadanos con nuestros impuestos y con las cotizaciones a la Seguridad Social.
En vez de apostar por los servicios públicos, invierten nuestro dinero en obras absurdas con una pésima gestión.
Un beso
Escribes:"ellos no dudarían en imponer el copago si la mala gestión del PSOE obligara a ello".
Lo que nos espera es eso. Todas las medidas de esta índole que tomen cuando lleguen al poder, la jsutificarán por la mala gestión del PSOE.
Si la situación actual no es buena, tendremos que prepararnos para cuando estos nos gobiernen.
Si gana RAjoy, cuestión que parece más que probable, el copago lo impondrán en ese cuatrienio.
Y que no vengan con cuentos. Antes de tocar los servicios más esenciales como la enseñanza y la sanidad hay que recortar en otras cosas. Por ejemplo, en compras de armas, reduciendo a la mitad los coches oficiales y los cargos de confianza, las obras majestuosas para honor del alcalde o presidente de turno, etc. En los presupuestos hay muchs sitios por donde meter la tijera que son mucho menos importantes que esos servicios básicos.
Salud y República
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