A veces un silencio, una negación o una respuesta ambigua comprometen mas que una respuesta concreta. Es lo que le ha pasado a Rajoy en su entrevista para la televisión Bloomberg en Nueva York.
El débil e inseguro Mariano Rajoy no ha podido blindarse como hace en España contra las preguntas incómodas de los periodistas no pesebreros. Fuera de aquí se ve obligado a responder a lo que aquí se niega. Y como no está acostumbrado a bregarse con periodistas sin una cuestionario previo, su debilidad e inseguridad le han jugado una mala pasada.
En esa entrevista al ser preguntado por la presunta financiación ilegal del P.P., en lugar de negar la posibilidad de una financiación ilegal por parte del Partido Popular, Rajoy ha respondido con un "hay cosas que no se pueden demostrar". Es decir, que no niega la posible financiación ilegal del P.P. si no el hecho de que esta se pueda demostrar. Con lo que explícitamente está aceptando la existencia de que el P.P. se financió de manera ilegal.
Pero no fue la única metedura de pata de Rajoy. Al ser preguntado por la destrucción de los discos duros de Bárcenas, Rajoy dijo que "lo desconozco absolutamente, uno no puede hablar de cosas que desconoce". Y en su ofuscación por ocultar la verdad sobre la corrupción en el P.P., no se recata al afirmar que nadie del PP había sido acusado en el caso Bárcenas, olvidando que los últimos tesoreros del P.P. están imputados y que Bárcenas además de tesorero del partido fue uno de los empleados mejor pagados del Partido Popular. El que ahora esas personas no estén en el P.P., no le exime de la responsabilidad política anterior.
En el P.P. fueron tan conscientes del ridículo que Rajoy realizó en la entrevista, que no les importó hacer un ridículo aún mayor. Intentaron por todos los medios que la cadena Bloomberg no emitiera las respuestas comprometedoras de Rajoy. Mas ridículo aún cuando en la información oficial de la Moncloa sobre la entrevista se elimino cualquier referencia sobre las mismas.
No se puede pretender mantener a un presidente del Gobierno metido en una burbuja de cristal, aislado de la ciudadanía y sin dar justificación de su actuación política. Eso solo es la manera de entender la política por las dictadura y los dictadores. Y por mucho que se empeñen, en alguna ocasión la burbuja se debilita y la debilidad y la inseguridad, propia de quienes no acostumbran a responder de sus actuaciones, les juega una mala pasada y en lugar de negar las evidencias lo único que consiguen es reafirmarlas.
Salud, República y Socialismo.
1 comentario:
¡Señoooorrr! ¡¡¡y que todavía nos falten dos años!!!
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