Ayer, en la sesión de control al gobierno, Cayo Lara, Coordinador General de Izquierda Unida, advertía a Rajoy de que "Si no se debate con luz y taquígrafos y se elabora un plan serio contra la corrupción, la bomba Bárcenas le estallará". Antes de que pasará 24 horas la bomba estalló.
Hoy ya sabemos quienes presuntamente cobraban de extraña manera en el Partido Popular. El que mas y durante más tiempo, el actual Presidente del Gobierno y Presidente nacional de P.P., Mariano Rajoy. A pesar de lo intentos de la Secretaria General del P.P., María dolores de Cospedal, de echar balones fuera, ya no se puede negar la evidencia de que algo sucio ha estado ocurriendo en el P.P. durante muchos años. Cuando alguien como el actual Presidente del Senado y alto dirigente del P.P., Pio García Escudero, confirma la veracidad de una de las anotaciones encontradas en los papeles desvelados hoy por El País, equivale a decir que la información ofrecida por ese periódico tiene serias garantías de ser verdad.
El Partido Popular tiene un muy grave problema. Y no se puede solventar con afirmaciones de que esos papeles no son la contabilidad del P.P. como afirma Fátima Bañes, o como que la contabilidad del PP se ha hecho en los términos previstos por la legislación vigente para los partidos políticos y ha sido fiscalizada por el Tribunal de Cuentas, como argumenta Carpedal. Pues claro que esos papeles no son la contabilidad del P.P. y que la contabilidad del P.P. se ha hecho legalmente ¡faltaría mas! Ese no es el problema. El problema es si al margen de la contabilidad oficial, el P.P. se financió ilegalmente y repartía prebendas entre sus principales dirigentes. El problema es el origen de esos dineros y si lo perceptores lo declararon a la hacienda pública. El problema es si a cambio de esas donaciones el P.P. realizó contraprestaciones a los donantes.
Estamos presuntamente ante el mayor caso de corrupción y financiación ilegal de un partido desde la democracia, en el que están implicados todas las cúpulas dirigentes del P.P. en los últimos 20 años y eso no se puede solventar con una simple alusión a que la contabilidad el P.P. está correcta y auditada por el Tribunal de Cuentas. También lo estaba la del PSOE y saltó lo de Filesa, también estaba la de Unio Democrática de Catalunya y se les ha demostrado un caso de financiación ilegal.
Los delitos pueden prescribir, el cobro de sobresueldos ilegales puede llegar a ser solo un falta fiscal merecedora tan solo de una multa, pero lo grave de todo es la responsabilidad política de lo ocurrido. Porque es una vergüenza y una indecencia que quienes están exigiendo a los ciudadanos de a pie sacrificios por encima de sus posibilidades, quienes han llevado a la miseria y a la ruina económica a este país bajo la excusa de la crisis económica, quienes han condenado a la exclusión social a varias generaciones de nuestros jóvenes, hayan estado durante muchos años viviendo por encima de sus posibilidades.
Los ciudadanos tenemos el derecho de saber la verdad sobre este sucio asunto. Mariano Rajoy tiene que dar explicaciones en el Parlamento, porque no es un ciudadano cualquiera, es el Presidente del Gobierno de este país. Mariano Rajoy no puede, como es su costumbre, esconder nuevamente la cabeza debajo del ala y esperar a que escampe. Y si esto se confirma debe presentar su dimisión y convocar elecciones generales anticipadas. Porque sino seremos el hazmerreir de Europa y de todos los países civilizados. Porque eso si que genera desconfianza entre los inversores y la comunidad internacional.
Salud, República y Socialismo.
