Con el inicio del nuevo año ha entrado en vigor el plan de Cospedal de eliminar el sueldo a los diputados castellano manchegos. Con ello la mayoría de los parlamentarios de Castilla – La Mancha volverán a sus trabajos, pero algunos irán directamente al paro porque no tienen donde incorporarse.
Dice la Cospedal que con esta medida se persigue ahorrar un millón de euros al año. Hasta en esto la Cospedal miente a los ciudadanos, porque no dice que muchos de ellos continuarán cobrando de la administración castellano manchega porque muchos de ellos son funcionarios públicos, (Alcaldes, concejales, maestros, médicos, etc.) que volverán a cobrar de las instituciones de las que dependan, luego ese hipotético ahorro será mas bien una ficción que una realidad.
Si el objetivo es el ahorro de un millón de euros cabe otra posibilidad mucho menos gravosa. Reducir un poco el gasto en cargos de confianza que en 2013 se incrementa un 88,7% con respecto al gasto de 2012. Castilla – La Macha pasa de un gasto de 26 millones de euros en 2012 hasta los 68 de 2013. Solo con que redujera un 2% el gasto en cargos de confianza, no sería necesario eliminar el salario de los diputados regionales.
Pero como ese no es el objetivo de la Cospedal, la excusa de la reducción de gastos le sirve de coartada para encubrir su verdadero objetivo, eliminar el control parlamentario de su gestión y reducir la participación democrática en las Cortes de Castilla – La Mancha. ¿De que manera la oposición parlamentaria puede llevar a cabo su obligación de control del ejecutivo si solo puede desarrollar sus actividad política en las horas libres de sus diputados? La Cospedal tiene un sentido totalitario y dictatorial de la política y por eso su objetivo no es reducir un gasto irrisorio, sino amordazar a la oposición para que no pueda cumplir con su obligación democrática. Por otro lado parece un sarcasmo y una tomadura de pelo que la política mejor pagada del estado (cobra de tres administraciones diferentes) exija austeridad a su oposición parlamentaria.
El trabajo de un diputado no es solo asistir a plenos y comisiones de trabajo. Mucho de su tiempo se emplea en preparar alternativas a las propuestas de gobierno, ejercer tareas de control parlamentario, preparar propuestas propias y para ello emplea muchas horas en reuniones con grupos afines. Además de la obligación que tienen los parlamentarios de dar cuenta de su gestión política ante sus electores.
Los ciudadanos están mediatizados por la mala reputación que una parte de la clase política tiene. Pero la propuesta de la Cospedal no solucionan esos problemas, porque solo representa un recorte de los derechos políticos que perjudica a la política y a la ciudadanía por igual. No se mejora la política recortando derechos políticos, sino echando de la política a los políticos corruptos, incompetentes, incoherentes y deshonestos. Y en esto los ciudadanos tenemos una gran responsabilidad, reeligiendo con nuestro voto a políticos corruptos o que no cumplen sus propuestas electorales.
Puede que alguno/a de quienes gritan “El próximo parado que sea un diputado”, se alegren de la actitud de la Cospedal. Yo creo que sinceramente se equivocan. Porque el hecho de que algunos diputados se vayan al paro no mejora en nada la democracia ni la participación democrática, sino todo lo contrario. Esta situación la empeora, porque a partir de ahora habrá un déficit democrático en las Cortes de Castilla – La Mancha. La oposición no podrá ejercer su obligación de controlar al ejecutivo y este no solo podrá hacer lo que le venga en gana sino que nadie podrá denunciar sus arbitrariedades.
La democracia española tiene muchos déficits pero estos no se arreglan anulando el control parlamentario de los grupos de oposición. Se arregla exigiendo y consiguiendo más democracia, más participación, una lucha decidida contra la corrupción política, una ley electoral más justa y proporcional y una mayor concienciación política de la ciudadanía contra la corrupción y los corruptos.
La medidas de la Cospedal son solo demagogia y caminan en el sentido contrario de lo que entendemos una mayoría de ciudadanos y ciudadanas como más democracia y mas participación política. Pero eso sí, han conseguido que ya haya diputados parados.
Salud, República y Socialismo.
Cuando una Presidenta de Comunidad Autónoma recibe tres altos sueldos de dinero público mientras está hablando de austeridad para la plebe (miseria) se denomina violencia estructural.
ResponderEliminarHay que defenderse!!!
Vale, Antonio. Quizá no estés alejado de lo verdadero en cuanto a una democracia de calidad.
ResponderEliminarYo no voy ahora a comprender ni una pizca a la Mariloly Cozpedal, pero últimamente me pregunto cómo puede ser una democracia de calidad.
Tal como está esta montada la democracia a la española, (la noséquécracia), con que acudieran a los parlamentos un diputado de cada partido, y votara con los créditos (o escaños) que tiene ganado su partido, bastaría.
Eso, solamente, daría la razón a la Cozpedal y a todo el que le parezca un despilfarro los sueldos a los diputados (y ya no hablemos de los senadores).
¿Qué hacer? No lo sé. Cada vez estoy más liado. No quisiera que nadie me confundiera con esos conservadores ultras.
En conclusión: yo anhelo una auténtica democracia. De calidad, eficaz, representativa, proporcional, transparente, respetuosa con el votante y con el no votante...
Y no soy de esos que pretenden que los políticos ganen un sueldo precario, algo así como el salario mínimo interprofesional.
Total, Antonio, que estoy hecho un lío y no me aclaro.
Salú, república y democracia verdadera,