Esperanza Aguirre, lideresa del P.P. de Madrid, no pierde oportunidad en su intento de segar la hierba bajo los pies de Rajoy. En sus declaraciones de hoy, le manda un nuevo mensaje subliminal. Esperanza Aguirre se siente abochornada por la corrupción en el P.P.
Mientras todos callan, ella utiliza la situación política actual del P.P. para erigirse en adalid de una presunta honestidad que solo es pura fachada, una autentica mentira. La hipocresía de la lideresa le hace decir cosas que sonrojan al más curtido ciudadano en el batallar político.
Porque quien esto afirma hoy, se le olvida que ella salio elegida presidenta de la comunidad de Madrid gracias a uno de los más escandalosos ejemplos de corrupción política, la compra de dos diputados socialistas para evitar un gobierno de izquierdas en Madrid. Escándalo de corrupción política sobre el que se echó tierra para que diez años después sigamos aún sin saber la verdad, porque al P.P. no le interesa llegar al fondo del asunto.
Pero Esperanza Aguirre también tiene mucho que callar sobre otras asuntos turbios de corrupción como el caso Gürtel en el que están implicados numerosos dirigentes del P.P. de Madrid. No vale solo con rasgarse las vestiduras cuando se utiliza la corrupción como arma arrojadiza contra el contrincante político, aunque este sea de su propio partido. La corrupción política es deleznable y censurable en todo momento. Lo que no vale es defender y proteger a los corruptos, como Bárcenas, y a la vez utilizar ese caso de corrupción para hacer méritos dentro de su partido. Porque Esperanza Aguirre cuando Rajoy ponía las manos en el fuego por Bárcenas, estuvo callada. Y estuvo callada mientras circulaban los sobres por los pasillos de Génova. Permanecía callada cuando el P.P. pagaba la defensa jurídica de Bárcenas y cuando se le seguía pagando un sueldo millonario cuando ya "no tenía responsabilidad política en el P.P." Y también se mantuvo callada cuando el P.,P. se personó como acusador en el caso Bárcenas, pero haciendo el papel de abogado defensor del hoy encarcelado tesorero popular. Hasta que el juez Pablo Ruz se vio obligado a expulsar de la causa al P.P. por esas razones.
Por eso la lideresa está desacreditada para sentirse abochornada por la corrupción en el P.P. Es todo pura hipocresía, tan solo un intento más de desacreditar a su rival interno y aparentar lo que no es ni ha sido nunca, una honesta y respetuosa dirigentes política.
Salud, República y Socialismo.
En otros países esta gente ya estaría destituída desde hace tiempo..y por mucho menos.
ResponderEliminarSalu2.
Ella a lo suyo, y lo grave es que su populismo cala en mucha gente, a pesar de estar lleno de mentiras y de intenciones aviesas contra todos, incluidos los líderes de sus partidos.
ResponderEliminarSalud y República