Entre 140 y 150 millones de mujeres existen en el mundo que han sufrido la Ablación. Combatir esta lacra social y concienciar de ella a las sociedades es el objetivo del Día Internacional Contra la Oblación.
Esta es una lacra social que se practica fundamentalmente en 28 países africanos donde la conjunción de incultura, tradición y religión hacen que esa cruel practica continué llevándose a cabo en muchos de esos países. Recientemente el Tribunal Constitucional egipcio ha rechazado la petición de grupos fundamentalistas islámicos para la legalización de la ablación genital femenina. Aunque la ablación está prohibida en Egipto es una practica muy enraizada, dado que se estima en un 90% los casos de mujeres mutiladas sexualmente, sobre todo en la zonas rurales del país.
La ablación está ligada sobre todo a la pretensión de dominación del hombre hacia la mujer. Argumentos como la fidelidad, la castidad, la necesitad de encontrar matrimonio están en las raíces de la imposición de esta cruel tradición hacia las mujeres. Estamos ante una mas de las imposiciones que, bajo la excusa de la tradición o la religión, se impone a la mujer para garantizarse el dominio sobre ellas por parte de los hombres.
Pero desgraciadamente no es solo un problema tercermundista. En Europa, el Parlamento Europeo calcula que 500.000 mujeres y niñas que viven en Europa sufren las consecuencias permanentes de la mutilación genital femenina
y otras 180.000 corren peligro de ser sometidas a esta práctica cada
año. Y en España se calcula que alrededor de 10.000 están en peligro de
ser sometidas a la ablación.
Las visitas a familiares
en esos países son utilizadas con frecuencia para practicar esta
mutilación, a pesar de estar perseguida esta práctica aunque se realice
fuera de la UE. La crisis también está influyendo, ya que el
empeoramiento de la economía incita al retorno y muchas mujeres se
enfrentan a ser mutiladas, porque si no, son consideradas “impuras, con
tendencia a la promiscuidad” o tienen dificultad para “conseguir
marido”.
Aunque
algo se está avanzando. En algunos países europeos se ha tipificado
como delito esa práctica y se persigue a quienes lo realizan dentro o
fuera de las fronteras europeas. En algunos países africanos se comienza
a perseguir esta práctica. Pero no es suficiente. Mientras la cifra de
niñas en peligro de sufrir una ablación sea tan vergonzosamente elevada,
no se estará ganando la batalla contra esta brutal agresión que hace
que miles de niñas puedan morir desangradas o a causa de infecciones,
mientras que aquellas que sobreviven a la agresión pasarán toda su vida
con graves secuelas.
Salud, República y Socialismo
Creo que te refieres a la Ablación y no a la Oblación...
ResponderEliminarLlevas razón ha sido un error tipográfico.
ResponderEliminarGracias
Una salvajada, un crimen que en la medida de lo posible debemos evitar.
ResponderEliminarSalud y República