No hubo derechos humanos para Sakineh Ashtianí en el día Internacional por los Derechos Humanos

Lo que ayer tarde era una alegría, de madrugada se convirtió en una decepción. Sakineh Ashtianí no había sido liberada, todo fue producto de una confusión. 

Hoy en el día Internacional por los Derechos Humanos todo es una decepción. El régimen teocrático iraní continua con su política de represión, imponiendo su particular y retrograda moral al conjunto de la sociedad iraní. Sin libertad política, ni religiosa, ni de opinión; la teocracia impone  terribles castigos a quienes osan incumplir su retrograda moralidad y sobre todo se ceba con las mujeres a las que reprime, margina y relega a un segundo plano.

Sakineh Ashtianí continua con la espada de Damocles a la espera de la caprichosa decisión de un régimen cruel que somete a las mujeres a castigos inhumanos como la lapidación, pero no debemos olvidar que existen otras 12 personas condenas a la lapidación en Irán y que en otro países islámicos  se aplica la ley islámica contra las mujeres que quieren vivir su sexualidad con libertad, contra los homosexuales  y contra todo aquel que no quiere que le impongan una moralidad estrecha y retrograda y que muchas veces son los propios dirigentes islámicos los primeros en incumplir.

Hoy en el día Internacional por los Derechos Humanos tampoco nos podemos olvidar de otras muchas agresiones que  millones de personas sufren en mundo. Mujeres que son violadas a causa de las guerras, niños que son reclutados a la fuerza para ejercer de mercenarios en guerras tribales, decenas de países que siguen manteniendo la pena de muerte en su legislación, sindicalistas que son asesinados por defender los derechos de los trabajadores, periodistas que son encarcelados por defender la libertad de expresión, personas que son encarceladas y asesinadas por defender la libertad de opinión, millones de personas que mueren de hambre y enfermedad ante la pasividad de los países ricos, personas que se contagian de SIDA por no tener acceso a medios de prevención o siguen los dictados de una iglesia católica retrograda y deshumanizada y así un largo etcétera de desigualdades y de vulneración de los derechos humanos de las personas que nos debería llenar de vergüenza al resto de la humanidad. Unos por no poner los medios para evitar su atropello y otros por no comprometernos lo suficiente en su defensa.

La lucha continua por liberar a Sakineh Ashtianí de su bárbaro e injusto castigo y por todos/as aquellos/as que sufren la represión de sus gobiernos y violan los derechos humanos de millones de personas en el mundo.

Salud, República y Socialismo.