O lo que es lo mismo, cada vez que el FMI hace recomendaciones al gobierno español para salir de la crisis económica, sus efectos tienen repercusiones negativas en el poder adquisitivo de los salarios y de las condiciones laborales de los trabajadores.
Ante la evidencia de las dificultades de reducción del desempleo en nuestro país (pronostican que hasta 2018 no se empezará a reducir), yo mas bien diría que ante el fracaso de la reforma laboral y las políticas de ajuste dictadas por este organismo, el FMI, en su último informe, se saca de la chistera una nueva ocurrencia para la creación de empleo: un acuerdo entre los agentes sociales, sindicatos y patronal, por el cual los sindicatos aceptaran una rebaja generalizada de los salarios del 10% y la patronal se comprometiera a crear empleo. ¡Hay que risa Marialuisa!
Como si no lleváramos los trabajadores suficiente reducción salarial desde que comenzó la crisis y mientras, los empresarios mirando para otro lado, o sea a su bolsillo, e incrementando beneficios. Como si fuera la primera vez que en este país se llegara a un pacto de similares características y al final solo se cumpliera lo referido a la reducción salarial. Argumenta el FMI que con este acuerdo, además de incrementarse el empleo se incrementaría el consumo y con ello más creación de empleo. ¡FALSO! En el mejor de los casos lo único que se conseguiría es repartir el trabajo existente, reducir los salarios globalmente con lo que se reduciría el poder de consumo de los trabajadores y un nuevo retraimiento de la economía.
Pero ya se ha alzado la voz de los economistas adictos al liberalismo diciendo que esta medida es positiva porque harían más competitivas a las empresas y nuestras exportaciones se harían más competitivas y eso generaría más empleo. Claro y si trasladamos a los trabajadores españoles las condiciones laborales y salariales de la India, por ejemplo, seriamos mucho más competitivos. Pero la competitividad no solo es sinónimo de salarios de miseria, eso es lo que piensen nuestros empresarios que solo saben hacer competitivas sus empresas mediante ese método. Ser competitivo tiene que ver sobretodo con buena formación, estabilidad laboral, investigación, condiciones dignas de trabajo y otras muchas cosas que solo unos pocos de nuestros empresarios creen en ellas y las llevan a la práctica.
Las políticas salariales restrictivas no deben ser el medio de hacer competitivas las empresas. Y la mejor prueba de ello es mirar hacia Europa, eso que nos dicen los gobernantes cuando quieren meternos con calzador una medida regresiva. Porque si no ¿como es posible que las empresas europeas sean mucho más competitivas que las muestras con salarios mucho mayores que los españoles? Los salarios tienen que ser dignos y tienen que permitir una vida digna a quien los percibe y quienes dependen de ellos, porque si no, no cumplen la labor social que los salarios deben tener.
No es con restricciones salariales como se va a crear empleo y salir de la crisis, si no con medidas opuestas, incremento de los salarios para incrementar el poder de consumo de los trabajadores y las familias. Solo incrementando el consumo y haciendo crecer la actividad económica se podrá salir de la crisis y crear empleo.
El FMI debería tener mas en cuenta su propio "mea culpa" cuando reconocían que se habían pasado de frenada con las políticas de recortes impuestas para salir de la crisis, y no seguir insistiendo en las mismas medias que solo han traído paro, recesión y miseria a los trabajadores. Y si no que se estén calladitos porque así no subirá el pan.
Salud, República y Socialismo.
Increible lo de esta gente. Van a conseguir su objetivo como sea. Empobrecer este país para que sirva con sus esclavos a los países más ricos.
ResponderEliminarY no me cabe duda de que lo hacen a conciencia.
Salud y República