miércoles, 5 de enero de 2011

La realidad de la mujer afgana tras una mascara

Algo insólito está sucediendo en Afganistán, las mujeres afganas están denunciando su realidad ante la televisión, pero eso si detrás de una mascara. 

Sami Mahdi, de 28 años, es el productor que se ha atrevido a emitir un programa en la televisión afgana en el que las protagonistas cuentan los abusos a que son sometidas por las sociedad islámica de Afganistán. Por obvios motivos de seguridad la mujeres aparecen con una mascara para evitar ser identificadas.

mujerafganaCmascara CNN asistió a la grabación de una de las emisiones, en las que las mujeres invitadas relatan cómo fueron forzadas a casarse cuando eran menores de edad, o situaciones en las que sus maridos violaron a otras mujeres en sus propias casas delante de sus hijos. En el programa grabado por CNN Soraya cuenta como su padre le obligó a casarse y ante su protesta el padre dice que “ella está en edad de casarse y esa es su decisión, no la de su hija”. Soraya dice que solo tardó tres días en darse cuenta que su marido era un hombre loco.

Cuenta Soraya como su marido llevaba mujeres a su casa para luego violarlas. Finalmente Soraya decidió huir de su casa y afirma que si hubiera sido encontrada por su marido, ella y sus tres hijos hubieran sido asesinados por él.

Este es solo un ejemplo de la realidad que sufren las mujeres afganas. En otro de los episodios una mujer cuenta como, cuando tenia 12 años, fue entregada a un hombre porque su hermano había matado a un familiar  de ese hombre.

Casi nada ha cambiado la situación de las mujeres en Afganistán después de 8 años de  intervención militar. El 88% de las mujeres son analfabetas; ocho de cada diez sufren violencia doméstica; el 95% de las niñas que empiezan primaria no termina secundaria. Y en las zonas más aisladas las mujeres siguen viviendo bajo las normas heredadas de los talibanes. Allí, más del 60% de las niñas son casadas antes de cumplir los 16 años y sin su consentimiento. Y mientras los gobiernos occidentales mantienen a un presidente títere y corrupto que manipula las elecciones y utiliza a las mujeres como moneda de cambio para mantenerse en el poder, promulgando leyes que permiten a los maridos de la etnia hazara (el 9% de la población afgana) castigar sin alimentos a sus esposas si no quieren satisfacer sus deseos sexuales.

Occidente no puede seguir al margen de esta situación, manteniendo su ayuda a un régimen que se niega a mejorar las situación de las mujeres, porque de lo contrario solo serán cómplices de la situaciones de represión y marginalidad de las mujeres afganas.

Salud, República y Socialismo.

5 comentarios:

  1. Antonio, otras veces hemos compartido el sentimiento de horror que nos inspira la situación de las mujeres en Afganistán. De nuevo hoy lo revivo con fuerza: tu entrada refleja la brutalidad que padecen estas mujeres, y nuestra complicidad es ya oprobio colectivo. Hace algunos días leí que Afganistán demuestra que la OTAN ya es un cadáver. Lo peor es que apodrece sobre las mujeres afaganas.

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  2. Lo realmente insoportable es el uso que se hizo de la situación de las mujeres en aquél momento desde occidente, para justificar la ocupación y ahora, con el apoyo de la otan y eeuu, es decir todos nosotr@s, siguen igual o peor.
    Que impotencia!

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  3. Terrible realidad que yo tambíen he denunciado con frecuencia. Lo peor es que Occidente es cómplice por permitir esta situación.
    Un beso

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  4. El Derecho Internacional tiene instrumentos en su mano. Otra cosa es que quiera utilizarlos. Ante estas barbaridades, tolerancia cero.
    Gracias, amigo, por denunciarlas.
    Saludos progresistas de Madrid.

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  5. Es una realidad terrible que por desgracia actualmente viven las mujeres afganas, independientemente del régimen que este en el pais.
    Aqui os dejo el enlace a un arículo referente a la mujer afgana durente el régimen talibán.
    http://www.suite101.net/content/las-mujeres-en-afganistn-durante-el-regimen-talibn-a36223

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