Hoy somos menos libres

Hoy ha entrado en vigor la llamada ley mordaza y con ella se han restringido nuestras libertades y derechos civiles. Con el eufemismo de garantizar la seguridad ciudadana, lo único que se pretende es criminalizar la protesta.

El Partido Popular no asume que sus políticas de recortes sociales, económicos y políticos no sean asumidos de buena gana por la ciudadanía. No soporta que los ciudadanos rechacemos  las políticas de austeridad impuestas por la troyka y asumidas por el PP, que tanta miseria, paro y empobrecimiento nos ha traído a la ciudadanía de a pie. Se extrañan y se incomodan porque no aceptamos de buen grado que se salven bancos y entidades financieras mientras se abandonan a su suerte a la ciudadanía más desprotegida.

El Partido Popular nos quiere en la miseria y además dóciles. No les cabe en su cabeza que no entendamos que todo esto lo hacen por el bien de España y de los españoles. Por eso están todo el día obsesionados con que su problema con las urnas y los ciudadanos es tan solo un problema de comunicación. Para convencernos de que es solo un problema de comunicación nos ponen a cuatro  pijos niños bien, para que con su verborrea de tertulianos televisivos nos convenzan de lo bueno que es PP y de que nuestro sacrificio solo es por el bien nuestro y de España. Y que dios nos lo pagará. Amén.

Y como nos quieren dóciles, ademas que en la miseria, nos aplican la ley del palo y la mordaza. Para ello, y como los jueces les quitaban la razón, pues se transforma lo que antes eran presuntos delitos por faltas administrativas. Para que así los jueces, ese grupo de peligrosos antisistemas, no tengan la oportunidad de poner en tela de juicio lo que un guardia de la porra a decidido que es delito. Se nos quita la tutela judicial, ya solo quedará la opinión infalible del porrero de turno. Se trata en definitiva de vencernos por la asfixia económica. Con lo cual nos robarán dos veces, primero con la austeridad y después con la multa administrativa. 

Como se decía, cuando existía el servicio militar obligatorio, "en peores garitas hemos hecho guardia". Porque no nos van a callar. Primero porque ni el franquismo nos calló y segundo porque el PP está en tiempo de descuento. Con peores leyes y más represión, rompimos la lógica del franquismo. Hacíamos huelgas sin estar reconocido el derecho a la huelga, escribíamos contra el franquismo sin haber libertad de expresión y nos manifestábamos estando prohibido el derecho a la manifestación. Corríamos, nos ocultábamos, recibíamos golpes de la policía franquista y algunos, muchos, se las tuvieron que ver con el Tribunal de Orden Publico y acabaron con sus huesos en la cárcel. Por eso estos, los herederos del franquismo, no van poder con nosotros. No les vamos a dejar que las libertades y derechos que tanto esfuerzo no ha costado conseguir, vengan ahora y nos la quiten de un plumazo porque al PP no les gusta que les mostremos nuestros rechazo a sus políticas de recortes y austeridad. Porque no les guste que les pongamos frente al espejo y vean su verdadera faz.

Además el PP está en tiempo de descuento y esto no va a hacer más que agudizar el rechazo de la mayoría social. Luego dirán que es un problema de comunicación, que no entendemos que lo hacen por nuestro bien, que es por nuestra imagen que hay mucho antisistema infiltrado en las manifestaciones y luego los de la porra se ponen nerviosos y pagan justos por pecadores. A lo mejor tenemos suerte y nos ponen a otro guaperas televisivo para que nos lo explique mejor. Pero se equivocan de nuevo, porque hemos entendido el mensaje. No se trata de mejorar la seguridad ciudadana, se trata de reprimir la contestación a sus políticas regresivas y represivas de estos negros cuatro años. Y como lo hemos entendido muy bien esto durará hasta que se celebren las próximas elecciones generales y los echemos del gobierno. Mientras tanto, tan solo nos queda resistir activamente y hacer lo que veníamos haciendo hasta ahora, protestar, manifestarnos y expresarnos libremente contra las políticas del Partido Popular.

Aunque a partir de ahora seamos menos libres, no dejemos que se lo crean. La calle es nuestra y no de ellos como decía Fraga que se pensaba que seguía siendo ministro de Información y Turismo del asesino dictador Francisco Franco. Y lo mejor, que las redes sociales también son nuestras.

Salud, República y Socialismo.