Mi primera lectura de los resultados de las elecciones en Galicia y País Vasco es que somos un país de masoquistas o que padecemos el síndrome de Estocolmo. Es incomprensible que después de sufrir la terrible política de recortes económicos, sociales y laborales, el P.P. haya mantenido casi el mismo nivel del votos que en las anteriores elecciones.
Mi segunda lectura es que los electores castigan mas la decepción de la acción de gobierno del PSOE que la política de recortes del P.P. En Galicia el P.P. solo pierde un punto de apoyo electoral mientras el PSOE pierde 10,5% y la izquierda en su conjunto un 2,2%. En el País Vasco todos los partidos tenían votos prestados dado que en las anteriores elecciones no pudo presentarse la izquierda aberzale y en estas si, pero mientras que el P.P. pierde 2,36 puntos el PSE pierde 11,58 puntos.
Por último mi tercera lectura me dice que la fragmentación de la izquierda ha magnificado la victoria del P.P. en Galicia. El P.P. pierde un punto pero incrementa en tres sus diputados mientras que la izquierda pierde pierde 2,2 puntos y 3 diputados. Cosas de la ley D’Hont que prima siempre a los grandes partidos.
Pero al margen de los simples datos, los resultados de las elecciones van a tener graves consecuencias para la ciudadanía, no solo del País Vasco y Galicia sino para el conjunto del estado español. El P.P. va a sentirse reforzado porque los drásticos recortes que esta imponiendo a la parte más desfavorecida de la sociedad española no le ha pasado factura y ahora se va a sentir legitimado, no solo a seguir por la misma senda sino a incrementar el ritmo de los recortes.
Rajoy tiene ahora vía libre para pedir el rescate de la economía española porque sabe que eso no le va a pasar factura electoral y tiene también vía libre para no revalorizar las pensiones por la subida del IPC de 2012. Es más se va a poder jactar de que la reforma del BCE va por buen camino aunque se retrase a finales de 2013 por imposición de la Merkel. Ya lo ha dicho Rajoy que el incremento de 40.000 millones de euros de la deuda española (4% del PIB español) por salvar a los bancos españoles, no es ningún problema. Total lo vamos a pagar los españoles de a pie con nuevos recortes (Aquí debería ir un insulto gordo, pero me abstengo porque tal como están las cosas podría ser acusado de rebelión o algo parecido). Y lo tan grave o mas que esto, son los recortes en derechos democráticos y civiles que nos van a imponer. Nos recortan y además no quieren negar el derecho a protestar. Con las reformas legales con que nos amenazan, pasaremos del estado de derecho al estado policial.
A mi lo que mas me indigna de todo esto es que nos dobleguemos y aceptemos de manera natural la política de recortes de un partido, el P.P., que tomando como excusa la crisis económica, está empeñado en cambiar drásticamente nuestro modelo económico social, laboral, político y de derechos y cargar todo el peso de la crisis económica sobre las clases populares . Los gallegos y los vascos tenían en estos momentos una extraordinaria oportunidad para evidencia el rechazo a esa política, castigando seriamente al P.P. en las urnas. No lo han hecho y por el contrario han ratificado, con su actitud, la política de recortes del P.P..
Y mas me indigna aún que esos que hoy no han castigado con su voto la acción de gobierno del P.P. serán mañana los que acusarán a los sindicatos de no hacer nada contra los recortes del P.P., los que se justificaran de miles de maneras para no secundar la huelga del 14 de noviembre. Aunque de eso ya hablaremos en otra ocasión.
Salud, República y Socialismo
Es menester que la parte Obrera del socialismo ponga a lavar su cara en el bidé
ResponderEliminarEstas elecciones no las ha ganado el PP, las ha perdido el PSOE. Y sí, puede que el PP piense que puede seguir porque se le permite, pero se le ha abierto un frente que no le gusta nada, el nacionalismo soberanista en Euskadi y eso le va a desgastar bastante.
ResponderEliminarSalud y República
No estoy de acuerdo, el auge del soberanismo en Eukadi le dará más votos en el resto del Estado.
ResponderEliminarPero, obtener el 25% de votos en un CCAA caciquil no te legitima a nada.
Saludos.