Pensaba Zapatero y el gobierno socialista que rindiéndose a las exigencias de la iglesia católica, esta no se tomaría la revancha a la primera de cambio. Pues se equivocaron, la voracidad del Vaticano es insaciable.
Pensaban que incrementándoles la subvenciones, no exigiéndoles la autofinanciación comprometida, no denunciando el preconstitucional concordato, manteniéndoles los privilegios fiscales, educativos etc., gastándose decenas de millones de euros del erario publica para financiar su visita y renunciando a cambiar la actual ley de libertad religiosa; el jefe del estado Vaticano vendría en son de paz y se dedicaría a lo que su obligación orientar la religiosidad de sus fieles.
Pues no, estos cándidos socialistas no aprenden y el jefe del estado Vaticano ha venido repartiendo leña a diestro y siniestro y se atreve a criticar la “laicidad” del estado español, comparándola con la situación previa a la guerra civil. Como si la iglesia católica no tuviera que hacerse una gran critica por su apoyo a las dictaduras de Franco, Hitler y Mussolini. ¿Quien es Benedicto XVI para decirnos a los españoles como queremos vivir nuestra democracia? ¿El estado menos democrático del mundo se atreve a dar lecciones a una democracia como la española? Quizá si no hubieran elegido tan detestables compañeros de viaje la laicidad de la II República no hubiera sido tan beligerante.
Se imaginan Vd. que hubiera sucedido si el presidente de una república bananera de visita en España criticará el sistema democrático español. Como mínimo se hubiera llamado a consulta al embajador.
En lugar de criticar el laicismo español ellos se deberían autocriticar sobre las causas por las que los españoles son cada vez menos católicos, se casan más por lo civil que por la iglesia, bautizan cada día menos sus hijos o tienen que cerrar iglesias por falta del sacerdotes o tienen que importarlos de Sudamérica para mantenerlas abiertas.
En lugar de venir con la soberbia de la que hacen gala deberían ser humildes y pedir perdón por los delitos sexuales y económicos cometidos por sus jerarcas y deberían ser humildes y preguntarse el porque de que la última visita de Pablo VI a España fue seguida por 2 millones de españoles mientras que la de Benedicto XVI solo ha sido seguida por 200.000 personas.
Y a pesar de todo eso Zapatero y el gobierno socialista en lugar de mantener la dignidad y poner a la iglesia en el lugar que le corresponde, el ámbito de lo privado, no hacen más que darles alas manteniéndoles e incrementando los privilegios pasados y rindiéndoles pleitesía, pensado que con ello la iglesia dejará de ser beligerante. Craso error la iglesia católica es insaciable. Así nos va.
P.D. Este blog se solidariza con la lucha de los saharauis acampados en El Aiún en defensa de su derecho a la autodeterminación y condena la tremenda represión realizada por las fuerzas de seguridad de la monarquía marroquí.
Salud, República y Socialismo.
Estos de la iglesia dicen sentirse perseguidos, y el gobierno de Zapatero es el que más privilegios le está concediendo. Mal hecho.
ResponderEliminarLo que yo digo: le das la mano y se toman el brazo.
ResponderEliminarPor cierto, me alegra mucho ver que tú también apoyas a los saharauis. ¡Ojalá todos fueran igual de solidarios, Antonio!
Saludos progresistas de Madrid.
La iglesia está muy tocada ya, sobre todo con los últimos casos de pederastia. Creo que poco a poco cada vez irá perdiendo más importancia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Lo he sufrido en diferido porque estaba fuera de España. Poco a poco voy poniéndome al día y también encabritándome. Ya he leído las declaraciones del Papa. Bueno para que seguir. Los socialistas como dices no aprenden y pienso que no aprenderán.
ResponderEliminarUna pena.
Un beso
El papa muerde la mano que le da de comer y los socialistas claudicando. Esto es una tragicomedia que si no fuera por lo serio del tema habría que hablar de sainete.
ResponderEliminarSalud y República
Lo que sucede es que no es sólo Zapatero quien paga los desmanes de este carcamal,sino todos nosotros.
ResponderEliminar¡Derogación del Acuerdo Vaticano,Ya!
¡Solidaridad con el pueblo saharaui!
Saludos
No puedo más que estar de acuerdo con lo que expones, Antonio, y comparto lo escrito por Felipe:
ResponderEliminar¡Derogación del Acuerdo Vaticano,Ya!
¡Solidaridad con el pueblo saharaui!
Besos..
Antonio, no es que no se enteren, es que le tienen pánico.
ResponderEliminarsaludos,