Esta derecha española no se quita las orejeras ni después de haber perdido por segunda vez consecutiva unas elecciones generales. Ahora es la Comunidad Valenciana la que vuelve a la carga con la asignatura de Ecuación para la Ciudadanía.
A cada paso que dan contra esta asignatura rizan un poco más el rizo. Lo nuevo es que la dichosa asignatura será enseñada a los jóvenes valencianos en la lengua de Shakespeare. Y para ello tendrán que contratar profesores de Filosofía, Geografía e Historia con conocimientos de ingles. Y claro si se une la posible falta de hacerse comprender del profesorado con la limitada comprensión del inglés del alumnado, la inadecuada implantación de la asignatura esta garantizada. Además el ejecutivo valenciano protegerá a los objetores de conciencia bajo la excusa de la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, olvidando que otros tres altos tribunales han desestimado la demanda de los objetores (Cataluña, Asturias y Aragón). Lo lógico sería pensar que si tres tribunales se han manifestado en contra de la objeción y solo uno a favor, la prudencia obliga o bien a esperar un decisión del Tribunal Supremo o ir por el camino de la mayoría de los tribunales y no aceptar la objeción.
Pero no. Ellos actúan como si nada hubiera pasado hace una semana y una mayoría de españoles hubieran avalado la política educativa desarrollada en la pasada legislatura. Y puestos seguir poniendo chinitas en el camino protegen a los objetores y les ofrecen una asignatura alternativa evaluable, que aún están pensando en desarrollar. Yo les diría que no se estrujen los sesos, no sea que les de un derrame cerebral de tanto pensar, y directamente impartan a los objetores la asignatura franquista de “Formación del Espíritu Nacional”, en la que se expresa con meridiana claridad el papel de la familia, la iglesia, la empresa y los sindicatos (verticales) en el Estado.
No solo tratan de impedir transmitir a los jóvenes los valores constitucionales, los derechos universales o la igualdad, si no que además pueden estar ocasionando un grave perjuicio a todos los objetores, ya que una sentencia desestimatoria, les imposibilitaría obtener el titulo de la ESO.
Que le importa, al Partido Popular, los derechos de los jóvenes si con ello cumplen su objetivo político: continuar con la política de la crispación.
Salud, República y Socialismo.
Ya lo he repetido en otros comentarios. ¡Ay de aquel que crea que se ha acabado la crispación! De él será el reino de los cielos.
ResponderEliminarSalud y República
Oye, pues si. Perfecto eso de dar Formación del Espíritu Nacional. Eso si, lo daremos en swahili o en taiwanés. ¿Por qué no? Así los niños que den esa asignatura se la tomarán tan en "serio" como los que van a tener Educación para la Ciudadanía en inglés.
ResponderEliminarEs curioso que desde el poder, desde las autoridades, se aliente a la objeción de conciencia. La objeción básicamente es un derecho a resistir los mandatos de la autoridad. Y llama la atención que las autoridades peperas hagan llamamientos a enfrentarse a lo que ellos representan.
Estoy con el señor Almazán de lleno. Crispación tenemos para rato. Estos tienen excedente de crispación en los almacenes y quieren colocar el producto como sea.
Estoy ansioso por ver tu aportación contra el estrés político. Me tienes en ascuas.
Un saludo.
Un saludo.
Veremos que pasa si el Tribunal Supremo rechaza el recurso de lo objetores. ¿Les convalidarán la asignatura sutitutoria?
ResponderEliminarAdanero no seas impaciente ya esta cerca el inicio de mi aportación antiestres.
Salud, República y Socialismo.